El escritor peruano Jorge Eduardo Benavides gana el Torrente Ballester
El escritor peruano Jorge Eduardo
Benavides ha ganado el Premio Torrente Ballester con la obra 'El enigma del
convento', una novela histórica ambientada en el siglo XIX entre España y Perú
y en la que la intriga, el suspense y las conspiraciones conducen la acción.
El jurado de los galardones ha votado hoy la
obra ganadora por mayoría en esta XXV edición de los premios, convocados
por la Diputación de A Coruña y uno de los más prestigiosos de España, por la
"calidad y excelencia" de esta obra literaria que está
"admirablemente bien escrita". Jorge Eduardo Benavides (1964,
Arequipa, Perú) acaba de publicar en Perú 'Un asunto sentimental' y es autor de
obras como 'La paz de los vencidos', 'El año que rompí contigo', 'Los años
inútiles', 'La noche de Morgana' o 'Un millón de soles'. El jurado del premio,
dotado con 25.000 euros y la edición de la obra, ha estado compuesto por
Amalia Iglesias, Ángel Basanta,José Antonio Ponte Far, José María Pozuelo
Ybancos, Charo Canal, Ernesto Pérez Zúñiga y Mercedes Monmany.
La novela negra francesa hace sombra a nórdicos y anglosajones
El género policiaco en Francia está de fiesta.
Hace 152 años que Honoré de Balzac publicó Un asunto
tenebroso, lo más próximo a una obra fundacional del género en el país vecino,
pero, lejos de mostrar signos de cansancio, la literatura criminal no para de
crecer más allá de los Pirineos y de extenderse por Europa rivalizando con
nórdicos y anglosajones. Uno de cada cuatro libros vendidos en el país
vecino es novela negra y prácticamente todas las editoriales tienen
su colección o sello policial. A la tradición del polar más clásico
de los sesenta y setenta, con una fuerte carga crítica y social, se
han unido otras voces nuevas, jóvenes que han llevado al género a otros
lugares, a otras realidades, que le han dotado de fuerza y lo han renovado sin
perder su esencia.
“El género está muy vivo en todas partes pero
en Francia es donde quizás han hecho una recepción más completa y una
reinterpretación más propia. Los franceses tienen más diversidad y lo combinan
con una personalidad muy propia. Van desde Fred
Vargas hasta el thriller de Franz Thilliez y en medio hay
autores que completan muy bien ese espectro”, asegura el escritor Lorenzo
Silva, alma del festival Getafe Negro, que se celebró en octubre en la localidad
madrileña y que este año se ha centrado, precisamente, en la novela negra
francesa.
El nombre de Fred Vargas, estrella en
Getafe, aparece en cualquier conversación sobre el género en Francia.
La creadora del comisario Adamsberg ha vendido 100.000 ejemplares
de La tercera virgen (Siruela) y destaca por su calidad."Es la
que más ha marcado esta época”, nos comenta el escritor Bernard Minier.
“Es esencial por su fantasía, por su galería de personajes, su punto de vista
post moderno pero, sobre todo, por su amor a la lengua”, asegura el autor
de El Círculo y Bajo el hielo (Roca, traducción de Dolors
Gallart).
La nómina de autores de un género que se
caracteriza por haber inutilizado las etiquetas que trataban de clasificarlo y
por haber derribado barreras de género y geográficas es inabarcable.
El thriller tiene en Francia una
repercusión que no ha tenido en ningún país fuera del mundo anglosajón y eso se
nota en su proyección exterior. Rodríguez-Castelló y Héctor Bofill ganan los Premis Ciutat de Gandia 2013
Con su décimo volumen de poesía,
titulado Estranyament, el alcoyano Manel Rodríguez-Castelló ha ganado el
Premi Ausiàs March de poesía en su quincuagésima edición. El trigésimo quinto
Premi Joanot Martorell de narrativa ha ido a parar al jurista y escritor
barcelonés Hèctor Bofill, por la novela Germans del Sud. El primero
se distribuirá el 5 de diciembre en librerías. El segundo, será distribuido el
23 de enero.
Convocados por el Institut Municipal d'Arxius
i Biblioteques, dependiente del Ayuntamiento de Gandia, los Premis Ciutat de
Gandia son publicados por Edicions 62. El de poesía está dotado con 12.000
euros y el de narrativa, con 25.000. La entrega de los galardones tuvo lugar la
noche del viernes en el Teatre Serrano de la capital de La Safor.
El libro de Rodríguez-Castelló está
estructurado en cinco partes que son al mismo tiempo etapas de un
viaje interior "más allá de conocimiento y memoria". El jurado que
decidió entre los 60 originales en competencia estaba formado por Jordi
Cornudella, Jaume Pont, Maria Josep Escrivà, Ana María Moix y Marc Granell.
Germans del sud, explicaron desde la
editorial, "es una epopeya con mucho humor que invierte los términos de la
historia y arrastra al lector por un huracán de luchas de poder y de pasiones
viscerales". El jurado estaba integrado por Ignasi Mora, Pilar Beltran,
Miquel de Palol, Adolf Beltran y Josep Maria Castellet.
La Feria Internacional del Libro de Miami presume de ser el festival literario más grande de los Estados Unidos. Y no es decir poca cosa, pues se trata del principal país editor del mundo, con más de 300.000 títulos al año, frente a los 80.000 escasos que se editan en España. Si los Estados Unidos están entre los territorios de mayor peso demográfico de la hispanofonía y su población hispana ha alcanzado el 16% nacional, cabría suponer que el futuro del libro en español estará ligado, al menos en parte, a su evolución estadounidense. Cebrián, Crehueras y Lamadrid, destacados editores españoles dijeron en el VI Congreso de la Lengua Española de Panamá, que el futuro del libro pasa por América Latina. Y podríamos añadir que los Estados Unidos pertenecen, por derecho propio, a la gran comunidad lectora de la América hispanohablante. Por eso preocupa el futuro del libro en español dentro de los Estados Unidos, sin reparar ahora en si se trata de libro autoeditado, en papel o en formato digital.
Elena Poniatowska, todas las vidas rotas
Ante las torrenciales conferencias de Karl Kraus, Elias Canetti descubrió que pocas tareas intelectuales son tan demandantes y ricas como la de saber oír. “Moriré el día en que no me interese escuchar a alguien hablando de sí mismo”, escribió el autor de La antorcha al oído. Elena Poniatowska pertenece cuando una sirvienta contesta el teléfono en una casa donde los patrones han salido, suele decir: “No hay nadie”. Ella está ahí, pero no representa vida alguna. ¿Quiénes son esos fantasmas que sirven el café y desaparecen? En el libro de cuentos Domingo 7, Poniatowska registra a la gente que vive como si se desconociera y a la que solo le puede suceder algo en su día libre. Las historias de quienes solo tienen vida por excepción narran el singular asueto de los descastados.
Las entrevistas de Poniatowska —reunidas en los diversos volúmenes de Todo
México— representan una historia dialogada de nuestra vida intelectual. El
procedimiento le ha permitido lograr excepcionales retratos hablados del pintor
Juan Soriano y del fotógrafo Gabriel Figueroa, y un trazo maestro de la vida
interior de Octavio Paz. También la llevó a una temprana novela sin ficción,
hasta no verte, Jesús mío,acerca de una indígena oaxaqueña que participa
como soldadera en la Revolución y luego tiene una mística. Los monólogos de la
protagonista, Jesusa Palancares, integran un tejido donde el habla popular roza
la metafísica.El oído de Poniatowska se adiestró en el periodismo y ha
dependido de una singular empatía con sus informantes. Armada de la sonrisa de
niña que conserva hasta ahora, hace preguntas de falsa inocencia. Sus
interlocutores entran en trance, bajan la guardia, y se confiesan. “No es la
voz sino el oído lo que guía una historia”, comenta Italo Calvino a propósito
de lo que Marco Polo le cuenta al gran Khan en Las ciudades
invisibles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario